Vengo a Ti, mi Médico de Amor, con el corazón roto- Parte 2

Ricardo Claure Peñaloza PODCAST

“Jesús de Nazareth quiere hoy revelarse a tu vida como el Médico que vino por los enfermos y no por los sanos; vino por los injustos. No hay justo ni aun uno, por cuanto todos habíamos pecado y estábamos destituidos de su Gracia y de su Gloria; mas pudimos ser aceptos por medio de la fe en Él, de su obra consumada en la cruz del Calvario, donde se ganó el derecho de ser nuestro Doctor, un Dulce Doctor, un Dulce Médico del corazón, que está presto a sanar toda herida que tienes en el alma.

Él no solamente es tu Creador, sino también es tu Buen Doctor lleno de Amor; el Médico de tu corazón que está roto por la maldad, y el único que puede sanar todo lo que hay en tu interior.

Es tan lleno de Amor y tan Poderoso, que te opera el corazón estando tú acurrucado en su regazo, con tu rostro hundido en sus vestidos de Amor, de Perdón y de Santidad. Y Él, tan Delicado Cirujano Dios de Amor, entra en tu corazón y te hace ver todas esas heridas que están infectadas, sangrando y que te causan dolor. Y te hace entender que debes perdonar y bendecir a quien o quienes te hirieron, dejando lugar al Dios que estableció que la venganza es de Él, que obrará siempre y cuando perdones de corazón. Con un corazón sanado y limpio podrás ver la Justicia de tu Dios Justo; antes, no.

Por eso, deja a Él todo aquello que ha estado trayendo dolor y sufrimiento a tu vida; descansa en Él, y Él hará. Toda causa de tristeza y dolor, Él sanará.

Si ya no puedes sentir su Presencia, si tu corazón se ha endurecido, acércate a Él clamando y contándole con humildad tu miserable condición. No hay nadie como Él en toda la tierra, Él quiere que lo conozcas así, está presto a oír todo lo que pueda salir de ti; y con su sola Presencia obrará en tu corazón, te cuidará y te acurrucará en sus brazos con todo su Amor.

Una persona que tiene problemas en su corazón, si no acude al médico se va a morir, va a descender al sepulcro. Es lo que tú tienes que tomar en cuenta, que puedes morir espiritualmente si no atiendes oportunamente las cosas que hay en tu corazón, que están doblegando tu vida espiritual, que no estás pudiendo perdonar, que no estás pudiendo asimilar, que no las puedes resistir, porque va más la fuerza de tu naturaleza caída; y no puedes vencer, y sientes que tu corazón está herido, destruido, lastimado, lacerado, sangrando, infectado. Pero es en ese momento que tú debes comprender que no hay nadie en la tierra que ha de poder ser médico de tu corazón, solamente Jesús de Nazareth.

Tú eres su paciente y no te debes rendir, cada día debes acudir a tu Dios Médico de Verdad, y verás de qué manera Él ha de obrar, verás sanidad en tu vida, en tu interior, y también a tu alrededor.

Esto es lo que tú tienes que hacer: no te dejes sumir en la soledad, en el dolor, en la tristeza; acude a Él. Si lloras mientras ruegas, clamas, gimes y te lamentas, debes saber que Él está viéndote con toda atención. Estás entre sus brazos, y Él está abrazándote, consolándote, y hasta derramando lágrimas juntamente contigo. Porque no te olvides que es un Dios Compasivo, ese es el Dios que te estoy presentando”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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